sábado, 3 de noviembre de 2007

Me encantaría tener una claridad absoluta y una visión eterna... espiritual.
Por ahora, no vislumbro más allá de esto.
Me han dicho que el optar como lo he hecho es un signo de falta de visión, de amor y de conocimiento de Dios (no teórico)...

Por algún motivo, desapareció la ansiedad y la tristeza. Aunque se añada el peso de estar yendo contra lo que dice mi iglesia, y decepcionando a personas que estimo.
... Se siente bien pasar tantos días sin sentir ganas de llorar.

Quizás es cobarde, pero también es valiente.

No hay comentarios.: